Hoy os enseño una manera muy muy fácil de hacer un lienzo con una foto.
El lienzo es muy útil para pisos alquilados en los que no os permiten
hacer agujeros, o si no os apetece dejar la casa como un queso Gruyer,
porque con un simple "cuelga fácil" se sostienen perfectamente.
Como materiales sólo necesitais:
Un lienzo en blanco (ultra barato en cualquier tienda de tipo
asiático...), cola blanca, un vaso con un dedo de agua y una brocha
pequeña o pincel grande.
Una foto digital que os guste y una impresora para imprimirla, o sino se la encasquetáis a alguien para que os la imprima!
Yo por el momento sólo lo he hecho con fotos en blanco y negro, algo
tocadas con photoshop para aumentar los contrastes, porque me gusta el
efecto que hace la cola restando un poco de nitidez a la imágen y los
contornos.
Lo primero que hay que hacer es preparar la foto, recortándola por el borde.
En el vaso con agua, echar aproximadamente el triple de cola que de agua y mezclarlo bien con el pincel.
Con esa mezcla pintar abundantemente el lienzo, y colocar encima, en la posición que queráis, la foto recortada.
Volver a pintar con la cola al agua toda la foto, incidiendo con el
pincel en los bordes, haciendo que la tinta de la foto se emborrone un
poco.
Mientras está mojado, la pinta es horrible, pero una vez seco, la cola
se vuelve transparente y le deja a la foto y al lienzo un acabado
ligeramente brillante.
Ahora sólo tenéis que escoger dónde colocarlo!